Puntos clave de la noticia:
- Solana ha completado un año sin interrupciones en la producción de bloques, manteniendo estabilidad incluso con el aumento en la actividad.
- El 30% de las transacciones siguen fallando, pero los traders han elevado tarifas para asegurar su inclusión en los bloques.
- Coinbase enfrentó retrasos en los retiros de SOL debido a la alta demanda, afectando a usuarios en momentos de volatilidad.
Solana (SOL) ha completado un año sin interrupciones en la producción de bloques, el mayor periodo de estabilidad registrado en su historia. Desde febrero de 2024, la red ha procesado transacciones de forma ininterrumpida, incluso con el aumento en la actividad. La incorporación de más nodos Firedancer ha permitido mantener el consenso entre validadores y mejorar la capacidad de procesamiento.
Solana No Puede Lidiar con la Alta Demanda
A pesar de la estabilidad en el consenso, los fallos en transacciones siguen siendo un problema. Alrededor del 30% de las operaciones no se completan, afectando a los usuarios que no pagan tarifas prioritarias. Durante momentos de alta demanda, como en el lanzamiento del token TRUMP, la tasa de éxito llegó al 79% porque los traders aumentaron sus tarifas para garantizar la inclusión en los bloques. Esta dinámica ha incrementado los ingresos para JitoSOL, que gestiona la construcción de bloques en la red.
Coinbase Tiene Horas de Demoras en las Transacciones de SOL
Los retrasos también han afectado a los usuarios que adquieren SOL en exchanges centralizados. Coinbase experimentó demoras en depósitos y retiros debido a la alta demanda del token, lo que generó especulaciones sobre la disponibilidad de reservas. Aunque el problema se resolvió, en el pasado algunas transferencias tardaron entre 6 y 9 horas en completarse, afectando a quienes intentaban operar en mercados de alta volatilidad.
El ecosistema de Solana ha evolucionado con mejoras en herramientas DeFi como el agregador Jupiter, que optimiza las transacciones en DEXs y reduce los tiempos de espera. Sin embargo, la congestión sigue siendo un desafío prioritario en periodos de alta actividad. La red ha logrado estabilidad en la producción de bloques, pero los usuarios aún deben lidiar con la imposibilidad de ejecutar transacciones de manera fluida