Aster registró una corrección del 8% en su precio, pero mantiene una trayectoria general al alza gracias a una combinación de factores operativos y de capital. El token Aster sigue mostrando resiliencia pese a ventas de grandes tenedores y temores por futuros airdrops, según los análisis citados.
El descenso del 8% se vinculó en los reportes a ventas de ballenas: dos carteras habrían depositado aproximadamente $22,88 millones en exchanges, un movimiento que amplificó la presión vendedora. Paralelamente, la expectativa sobre la etapa 3 del airdrop —alrededor del 4% de la oferta— generó advertencias sobre posible dilución, también recogidas en el mismo análisis.
El elemento que sostiene la tendencia es operativo: la DEX de Aster concentra un elevado volumen de negociación, con cifras citadas de hasta $46.000 M y picos reportados de $64.000 M en determinados períodos, lo que atrae liquidez y facilita descubrimiento de precio, según informes de mercado. Una DEX (exchange descentralizado) es una plataforma que permite intercambios de tokens directamente entre usuarios sin custodiar fondos por una entidad centralizada.
Además, la infraestructura combina ejecución resistente a MEV, accesibilidad multichain y características de privacidad, según descripciones técnicas difundidas en los reportes.
Aster: arquitectura de resiliencia que impulsa el repunte
La tokenómica también juega un papel central: Aster tiene una oferta máxima de 8.000 M de tokens y más del 50% de los tokens reservados para incentivos comunitarios, lo que, junto a retrasos en desbloqueos programados, busca mitigar el impacto de nuevas emisiones.
Por último, indicadores de flujo de capital como el Chaikin Money Flow mostraron un repunte en los informes citados, señalando entradas de liquidez que respaldan el movimiento alcista.
La tokenización de la liquidez y el comportamiento de los grandes tenedores introducen dinámicas contrapuestas: ventas puntuales provocaron la corrección reciente, pero hubo acumulaciones significativas previas —alrededor de $126 M— según reportes on‑chain, que suelen anticipar repuntes.
Además, Aster ha mostrado una correlación negativa con Bitcoin cercana a -0,58, lo que le permite actuar, en ocasiones, de cobertura relativa; en un periodo referido en los análisis, Bitcoin cayó 9,41% mientras Aster avanzó 13,20% en siete días.
En conclusión, Aster combina un ecosistema operativo con tokenómica diseñada para retener liquidez, lo que ha amortiguado un retroceso puntual del 8% y sostenido la tendencia alcista.
