A pesar de que los precios de las criptomonedas iniciaron la semana con números rojos, los ETFs de Bitcoin, Ethereum y XRP protagonizaron una recuperación sorprendente en términos de flujos de capital institucional. Según el informe más reciente proporcionado por la firma de gestión de activos digitales CoinShares, estos productos de inversión lograron revertir una tendencia negativa de un mes. Este repunte en el interés institucional sugiere una divergencia momentánea entre el precio spot y la acumulación estratégica de activos.
El mercado venía de sufrir cuatro semanas consecutivas de sangría financiera, acumulando salidas por un total de 5.700 millones de dólares antes de este cambio de tendencia. No obstante, los datos revelan que los inversores aprovecharon la volatilidad para reingresar al mercado, inyectando más de mil millones de dólares en solo siete días. Esta maniobra demuestra la resiliencia de los vehículos de inversión regulados frente a la incertidumbre que domina el comercio diario de criptoactivos.
¿Podrán los flujos institucionales frenar la sangría actual de precios al contado?
Al desglosar las cifras reportadas, se observa que Bitcoin lideró la carga con entradas de 464 millones de dólares, seguido de cerca por Ethereum con 309 millones. Sin embargo, el dato más destacado recae sobre XRP, que registró sus mayores entradas semanales históricas por valor de 289 millones de dólares. Este flujo masivo hacia XRP representa un 29% de sus activos bajo gestión, impulsado probablemente por el lanzamiento de nuevos productos cotizados en Estados Unidos.
Por otro lado, la distribución geográfica de estos movimientos financieros muestra un claro dominio de los inversores estadounidenses, quienes aportaron 994 millones de dólares al total global. Mientras tanto, Canadá y Suiza contribuyeron con cifras menores pero positivas, contrastando con Alemania, que reportó salidas de capital. Es importante notar que los volúmenes de negociación fueron inusualmente bajos, alcanzando solo 24.000 millones de dólares debido a la festividad de Acción de Gracias.
El contexto de este rebote en los fondos se fundamenta en las expectativas macroeconómicas generadas por las declaraciones de miembros de la Reserva Federal. Los comentarios de John Williams sobre una política monetaria restrictiva elevaron las esperanzas de un posible recorte de tasas de interés en diciembre. Por ende, los inversores parecen estar posicionándose anticipadamente ante cambios en la economía global que favorezcan a los activos de riesgo.
¿Estamos ante una oportunidad de compra estratégica o una trampa bajista mayor?
Sin embargo, la realidad del precio al contado cuenta una historia diferente y más pesimista al inicio de esta nueva semana. Bitcoin ha caído un 5% en las últimas 24 horas, arrastrando consigo a Ethereum y XRP, y cotizando alrededor de los 86.800 dólares. Esta desconexión entre los flujos de los fondos y el precio de mercado actual ha generado liquidaciones masivas que superan los 637 millones de dólares.
El impacto en el mercado es tangible, con Bitcoin perdiendo un 21% en el último mes y alejándose un 31% de su máximo histórico reciente. Los activos beta como Ethereum y XRP han seguido esta tendencia bajista, perdiendo un 5,6% y un 6,5% respectivamente en el último día. La fragilidad del soporte actual mantiene a los operadores en un estado de alerta máxima, temiendo que el optimismo de los flujos de fondos sea efímero.
Para finalizar, aunque los fondos cerraron noviembre con fuerza, el mercado enfrenta una prueba crítica para determinar si este capital institucional es suficiente para sostener los precios. La volatilidad continúa siendo la norma, y los próximos movimientos de la Reserva Federal serán determinantes. Se espera que la correlación entre los flujos de ETFs y el precio spot se realinee en las próximas sesiones bursátiles.
