En medio de una intensa racha bajista en las acciones vinculadas a criptomonedas, ARK Invest, liderada por Cathie Wood, ha aprovechado el retroceso para comprar participaciones significativas en varias compañías del sector, marcando un contraste entre el sentimiento del mercado y la estrategia de inversión institucional.
Las acciones relacionadas con el ecosistema de criptomonedas han continuado extendiendo su ciclo de ventas, reflejando una combinación de presión en los activos digitales y cautela entre los inversores tras un año volátil para los criptoactivos. En respuesta a esta racha bajista, ARK Invest —el fondo de inversión de Cathie Wood— ha entrado al mercado, adquiriendo posiciones en varias empresas claves del sector.
La firma compró cerca de $60 millones en acciones de empresas con exposición al mercado cripto, incluyendo participaciones importantes en Coinbase, Bullish y Circle, entre otras, aprovechando los precios deprimidos durante el sell-off. Esta estrategia marca una postura contrastante con el sentimiento defensivo predominante, sugiriendo que ARK ve valor en estas compañías pese a la reciente caída.
Compras estratégicas en la caída del mercado cripto
Este movimiento llega en un momento en que el mercado de activos digitales, y en especial los títulos de empresas relacionadas con criptomonedas, ha sufrido pérdidas significativas. El precio de Bitcoin, el token de referencia, ha mostrado presión bajista persistente, contribuyendo al mal desempeño de acciones que dependen en gran medida del ecosistema cripto y de la actividad de trading en general.
Además, otras criptomonedas como Hedera han caído a mínimos de un año mientras la presión de venta domina gran parte del mercado, impulsada por una combinación de reducida liquidez hacia el cierre del año y movimientos macroeconómicos más amplios que han enfriado el apetito por activos de mayor riesgo.
El enfoque de ARK se asemeja a una estrategia de “comprar en la caída”, buscando potenciales oportunidades de recuperación futura en compañías que considera bien posicionadas dentro de la industria digital y financiera emergente. Sin embargo, el desenlace aún depende de cómo evolucionen los principales indicadores del mercado, la actividad de los inversores y el sentimiento general hacia los criptoactivos de cara a 2026, que influirán tanto en los precios de las acciones como en los activos digitales subyacentes.
