El precio de Bitcoin podría haber confirmado oficialmente su entrada en un mercado bajista tras descender hasta los 80.000 dólares durante la sesión del viernes. El reconocido analista Rekt Capital advirtió que las estructuras alcistas se invalidan automáticamente cuando cambia la tendencia macroeconómica, destacando la aparición del temido cruce de la muerte.
El par BTC/USD cerró por debajo de su media móvil de 50 semanas, perdiendo un nivel crucial para sostener la estructura positiva a largo plazo. Simultáneamente, la media simple de 50 días cruzó bajo la de 200 días, formando esta señal técnica bajista por primera vez desde enero. Por otra parte, datos de Glassnode indican que las pérdidas realizadas superaron los 800 millones de dólares, impulsadas principalmente por la capitulación agresiva de los tenedores a corto plazo.
¿Se repetirá el colapso histórico de precios tras esta señal técnica?
Históricamente, este indicador gráfico ha precedido a desplomes de precios severos de entre el 64% y el 77% en ciclos de mercado anteriores. En enero de 2022, una formación idéntica anticipó la caída hacia los 15.500 dólares durante el colapso del exchange FTX.
Asimismo, la incapacidad actual para recuperar la media móvil exponencial sugiere que la tendencia macro ha cambiado radicalmente, dejando a los compradores vulnerables ante una corrección mucho más profunda y duradera.
¿Podrán los inversores minoristas resistir la ola masiva de ventas?
La velocidad de estas pérdidas refleja un lavado significativo de la demanda marginal mientras los compradores recientes deshacen rápidamente sus posiciones en pérdidas. Por otro lado, el analista IT Tech de CryptoQuant señaló que fallar en recuperar la base de costos confirma la tendencia negativa. Esto impacta directamente la economía del sector, ya que el indicador SuperTrend semanal también emitió una señal de venta que suele marcar el inicio oficial de los inviernos cripto.
El mercado enfrenta una prueba decisiva para evitar una extensión de la caída hacia el soporte de abril situado en 74.500 dólares. Los inversores a corto plazo siguen vendiendo en pánico, lo que añade combustible a las predicciones pesimistas de los expertos. La validación del cruce de la muerte obliga a reevaluar estrategias de riesgo ante la alta probabilidad de que la corrección actual se profundice significativamente en las próximas semanas de negociación.
