La National Basketball Association (NBA) se enfrenta a una demanda colectiva propuesta por inversores descontentos de Voyager Digital, una plataforma de criptomonedas que colapsó, alegando que la liga es parcialmente responsable de sus pérdidas millonarias.
La demanda, presentada en un tribunal de Miami el 6 de febrero, acusa a la NBA de ser «gravemente negligente» al aprobar un acuerdo de promoción entre Voyager y los Dallas Mavericks, equipo de baloncesto de la NBA propiedad de Mark Cuban.
Según los demandantes, la NBA debería haber actuado como una especie de «guardián», evaluando adecuadamente los riesgos asociados con la promoción de plataformas de criptomonedas como Voyager, Coinbase y FTX.
Se afirma que la NBA aceptó «miles de millones en compensación promocional» mientras enfrentaba pérdidas significativas debido a la pandemia de COVID-19, lo que la habría llevado a adoptar una postura más permisiva hacia los riesgos financieros.
La demanda señala a la firma de abogados McCarter & English, que emitió una opinión legal para respaldar la legalidad de los tokens de Voyager
Los demandantes acusan a la firma de abogados de utilizar su credibilidad para emitir una opinión engañosa sobre la naturaleza de los tokens y NFT’s, lo que habría contribuido a la confianza errónea de los inversores y socios potenciales en la plataforma.
Este no es el primer litigio relacionado con Voyager y sus asociaciones.
Anteriormente, en 2022, un grupo de inversores demandó al expropietario de los Dallas Mavericks, Mark Cuban, por promocionar Voyager y supuestamente representarla como segura, acusación que él niega rotundamente.
La situación legal en torno a las asociaciones entre celebridades, organizaciones deportivas y empresas de criptomonedas se ha vuelto cada vez más tensa, especialmente después del colapso de FTX en 2022.
Se han presentado demandas contra numerosas figuras, incluidas el equipo de Fórmula 1 de Mercedes, la Major League Baseball, Tom Brady, Steph Curry, Shaquille O’Neal y Larry David, entre otros.
Hasta el momento de la redacción de este artículo, ni la NBA ni McCarter & English han emitido comentarios sobre la demanda.
La resolución de este caso podría tener implicaciones significativas para la responsabilidad de las asociaciones entre organizaciones deportivas y empresas de criptomonedas en el futuro.