Dogecoin repuntó con fuerza tras el inicio de cotización del primer ETF de DOGE en Estados Unidos. El REX-Osprey Dogecoin ETF (DOJE) comenzó a operar el 18 de septiembre y, en sus primeras negociaciones, impulsó una subida cercana al 12%. El aumento del volumen de negociación —un 40% más que a comienzos de 2025— sugiere un cambio en el apetito del mercado, con impacto para comerciantes y tesorerías que siguen los flujos de capital.
Lanzamiento del ETF y reacción del mercado
El DOJE es la primera oferta que brinda exposición regulada a Dogecoin sin requerir la custodia directa del activo. El producto abrió operaciones bajo el identificador DOJE y es operado por REX Shares y Osprey Funds.
La expectativa de una accesibilidad institucional más amplia actuó como catalizador del repunte inicial. En la apertura, el precio de DOGE avanzó alrededor de un 12%, y los volúmenes de negociación se aceleraron —hasta un 40% por encima de inicios de 2025—, una dinámica vista como señal de cambio en la preferencia del mercado.
Panorama regulatorio y perspectivas
El contexto regulatorio sigue siendo determinante. La SEC continúa evaluando solicitudes adicionales: Bitwise obtuvo una extensión en la decisión hasta el 12 de noviembre de 2025, mientras que Grayscale mantiene la tramitación para convertir un trust en un producto listado (GDOG). El nuevo entorno de listado y las reglas de la SEC pueden acelerar o ralentizar futuros lanzamientos.
Las proyecciones dependen de los flujos hacia el ETF. Analistas de TipRanks estiman que, con entradas moderadas, el precio podría subir a $0,35 para el primer trimestre de 2026, aunque este escenario está condicionado a la magnitud y persistencia de las entradas. Otros pronósticos más agresivos circulan en medios especializados, pero permanecen sujetos a supuestos de adopción institucional sostenida.
El debut del DOJE altera varios vectores de decisión para los actores del mercado. Se anticipa un posible aumento de entradas desde gestores tradicionales y una mayor correlación entre DOGE y productos financieros tradicionales, con potencial de mayor volatilidad ante flujos masivos. Las próximas decisiones de la SEC, en particular la prevista para Bitwise el 12 de noviembre de 2025, marcarán el calendario de nuevos ETFs sobre altcoins.
Para tesorerías y comerciantes, la lectura operativa inmediata es clara: mayor disponibilidad de producto regulado reduce fricción de acceso, pero no elimina riesgos de mercado ni de ejecución. La presión de compra inicial puede revertirse si los flujos no se sostienen o si la SEC introduce condiciones adicionales; el seguimiento de los volúmenes y del calendario regulatorio será clave mientras la comunidad espera el dictamen sobre Bitwise y observa posibles ETFs de otras altcoins.
