La tan esperada colaboración entre BitMEX, un importante exchange de criptomonedas, y Astrobotic, una empresa de tecnología privada, se ha topado con un problema. Su misión conjunta, cuyo objetivo era llevar Bitcoin literalmente «a la luna», ahora se enfrenta a un posible fracaso debido a una fuga de combustible.
BitMEX había anunciado previamente su asociación con Astrobotic para colocar Bitcoin en su módulo de aterrizaje lunar, Peregrine 1. La nave espacial se lanzó desde Florida el lunes 8 de enero de 2024. Sin embargo, pocas horas después del lanzamiento, los ingenieros que monitoreaban la nave notaron un problema con la alineación de sus paneles solares.
Esta desalineación significa que Peregrine 1 no puede obtener suficiente energía del sol para cargar sus baterías. Como resultado, se ve obligado a utilizar más de sus menguantes suministros de combustible para mantener el rumbo. Una vez que se agote este combustible, Peregrine 1 comenzará a perder potencia y comenzará a «dar vueltas».
La misión era importante no sólo para BitMEX y Bitcoin sino también para otros clientes que no son criptomonedas. La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio de los Estados Unidos (NASA) había comprado espacio para varios experimentos en el módulo de aterrizaje.
La NASA, Bitcoin y Estrellas de Ciencia Ficción se Encuentran Entre los Pasajeros a Bordo del Peregrine 1
La NASA sostiene que se espera que su reciente colaboración con el sector privado para la exploración lunar fomente una mayor innovación y conduzca a reducciones de costos a largo plazo. La agencia también reconoce la posibilidad de que algunas misiones no logren sus objetivos y está preparada para tales resultados.
Además, la misión transportaba los restos humanos cremados del astronauta Philip K. Chapman, el creador de Star Trek, Gene Roddenberry, y varios de los miembros del elenco del programa de ciencia ficción.
BitMEX ha estado capitalizando la publicidad generada por la misión al organizar su propia competencia comercial. Esto permite a los comerciantes ganar potencialmente una gorra de béisbol firmada por Arthur Hayes, cofundador de BitMEX, así como 100.000 USDT para dividir entre los principales comerciantes.
A pesar de los desafíos actuales, la misión representa un paso significativo en la integración de las criptomonedas y la exploración espacial. Destaca el vasto potencial del ecosistema Bitcoin, ampliando sus fronteras más allá de los límites de la Tierra.
A partir de ahora, el destino de la misión está en juego. El mundo observa con gran expectación, esperando un resultado positivo. Independientemente del resultado, esta misión sin duda ha marcado un momento histórico en los anales tanto de las criptomonedas como de la exploración espacial.