Puntos clave de la noticia
- Solana sufrió un apagón debido a un fallo en su sistema BPF, esencial para ejecutar programas.
- El problema se vincula con cambios introducidos por una propuesta de mejora anterior.
- Aunque el precio de SOL no se vio afectado, el incidente destaca desafíos en la gestión de cambios en blockchains de alto rendimiento.
La blockchain de Solana, conocida por su alta velocidad y capacidad de procesamiento, enfrentó un revés significativo el martes pasado cuando experimentó un apagón que interrumpió la producción de bloques durante casi cinco horas.
Esta no es la primera vez que Solana enfrenta problemas de estabilidad operativa, y el último apagón ha generado preguntas sobre la robustez de su infraestructura.
Un análisis detallado de los eventos revela que el fallo crítico ocurrió en el cargador de Berkeley Packet Filter (BPF), una parte esencial para desplegar, actualizar y ejecutar programas en la red de Solana.
Solana outage, what happened?
BPF loader, the “Berkley Packet Filter,” which is the mechanism to deploy upgrade and execute programs on Solana, failed. This seems to relate to a previous SMID (Solana Improvement Proposal) that altered some of the features including the adding a…— matthew sigel, recovering CFA (@matthew_sigel) February 6, 2024
Este problema parece estar relacionado con cambios introducidos por una Propuesta de Mejora de Solana (SMID) previa, que incluyó la eliminación del uso de metadatos en BPF.
La actualización 0093 de Solana introdujo estos cambios, pero también dejó una puerta abierta a un posible bug.
Este bug fue detectado durante pruebas en el testnet, y aunque se desarrolló una solución para él, aún no se había implementado en la red principal debido a las pruebas en curso.
Se especula que este bug pudo haber sido activado manualmente, lo que llevó al colapso de Solana
Los desarrolladores rápidamente trabajaron en una solución, reescribiendo líneas de código para eliminar el bug y proporcionando un parche crítico para el software principal.
Sin embargo, reiniciar la red no fue una tarea sencilla.
Requería que los validadores crearan un snapshot del último bloque verificado por el 66% de la red, alcanzaran consenso en este bloque y luego reiniciaran la cadena.
El proceso solo se completaría una vez que el 80% de los validadores estuvieran de acuerdo en el último bloque, lo que implicaba un riesgo de nueva interrupción si la solución no funcionaba según lo esperado.
Las repercusiones de este apagón se sienten no solo a corto plazo, con una esperada actividad significativa en DeFi una vez que la red se restablezca, sino también a largo plazo.
Este incidente podría influir en futuras discusiones y desarrollos de SMID, ralentizando potencialmente la innovación en Solana mientras las propuestas futuras son sometidas a un mayor escrutinio.
A pesar de la interrupción, el precio de SOL no sufrió un impacto negativo y, de hecho, cerró el día de negociación con una vela verde.
Esto sugiere que, a pesar de los desafíos técnicos, la confianza en el potencial a largo plazo de Solana permanece intacta entre los inversores.
El apagón en Solana destaca la importancia crítica de la estabilidad operativa en las blockchains de alto rendimiento y plantea preguntas sobre la gestión de cambios y pruebas en entornos tan dinámicos como el cripto espacio.