Zcash propuso un mecanismo de tarifas dinámicas destinado a evitar que los usuarios sean excluidos a medida que la demanda de la red y el valor de ZEC aumentan. El plan, liderado por colaboradores de Shielded Labs, reemplaza las tarifas estáticas de la red por un modelo sin estado y sensible al uso. El objetivo es reducir el spam, preservar la privacidad y apoyar un acceso institucional más amplio sin comprometer la experiencia de los usuarios.
Durante años Zcash dependió de un calendario de tarifas estáticas —inicialmente 10,000 zatoshi, luego reducido a 1,000— que funcionó durante periodos de tranquilidad pero dejó la cadena vulnerable a ataques de spam de bajo costo. Estos ataques saturaron billeteras, aumentaron la latencia y, en algunos casos, perjudicaron el software de usuario, evidenciando la necesidad de un enfoque más adaptativo.
Una mitigación anterior, el cambio de contabilidad basado en acciones ZIP-317, eliminó ciertos vectores de abuso cobrando por componente de transacción pero mantuvo tarifas previsibles e incapaces de rastrear la tensión de la red en tiempo real. A medida que el precio de ZEC se recuperó y la actividad aumentó, las tarifas fijas se tradujeron en mayores costos reales para los usuarios, con casos extremos donde proteger muchas transacciones pequeñas requería cantidades de ZEC de dos dígitos y amenazaba la accesibilidad básica.
Los participantes del mercado reaccionaron rápidamente: el anuncio coincidió con un repunte del 12–13% en ZEC, operando en un rango aproximado de $395–$405, lo que señaló el apoyo de los inversores a un plan que aborda tanto la volatilidad de costos como los riesgos de spam.
Cómo funciona la tarifa dinámica propuesta para Zcash
La propuesta introduce una tarifa sin estado calculada a partir de la tarifa mediana por acción observada durante los 50 bloques precedentes, reforzada con transacciones sintéticas para simular congestión constante. Las tarifas se agrupan luego en potencias de diez para mejorar el cálculo y reducir la vinculabilidad entre transacciones, una medida deliberada para preservar la privacidad.
Se abrirá un carril de prioridad temporal bajo alta carga, permitiendo a los usuarios pagar hasta 10× la tarifa estándar para obtener espacio en el bloque. Como explica la propuesta, esto da a los usuarios “una forma de competir por el espacio de bloque sin rediseñar el protocolo”, posibilitando una priorización a corto plazo sin una reforma sistémica.
Se incluye el quemado de tarifas como un mecanismo de protección económica: este mecanismo elimina permanentemente una porción de las tarifas de transacción de la circulación para aumentar el costo del spam y alinear los incentivos de los mineros con la salud de la red. El quemado de tarifas se define aquí como la eliminación permanente de una porción de las tarifas de transacción de la circulación.
La implementación se realiza por fases para limitar la interrupción: el monitoreo fuera de cadena recopilará primero datos de comportamiento, luego el modelo podrá adoptarse opcionalmente como política de billetera y, tras la aprobación de la comunidad, se propondrá un cambio de consenso sencillo. Este cambio incluiría límites de altura de vencimiento y la regla de potencias de diez.
La propuesta de tarifa dinámica replantea el precio de las transacciones como una herramienta para la salud de la red en lugar de un parámetro estático, con el objetivo de reducir el spam, proteger la privacidad y apoyar el acceso institucional.
