El mercado cripto muestra una rotación de capital hacia altcoins mientras Bitcoin entra en fase de consolidación. Este desplazamiento ha impulsado rendimientos notables en proyectos con narrativa o producto diferenciados, y plantea preguntas sobre riesgo y liquidez para inversores profesionales y minoristas.
ENA (Ethena) muestra alzas ligadas a su propuesta de valor en DeFi: cotiza cerca de $0,289 y anotó un avance reciente del +7,88%. Su arquitectura respalda una moneda estable sintética llamada USDe mediante colateral delta-hedged en ETH y BTC, y genera rendimiento a partir de recompensas de staking y tasas de financiación en mercados de futuros perpetuos.
El proyecto describe su oferta como un “crypto-native yield”, según la documentación del protocolo, y ha atraído proyecciones muy optimistas —Arthur Hayes proyecta hasta 51x para ENA hacia 2028— que combinan narrativa de producto y apetito especulativo en plataformas de negociación.
HYPE es el token nativo del exchange descentralizado Hyperliquid, que está registrando un volumen de comisiones diarias significativo, alrededor de $1,7 millones, y cotiza cerca de $33,73 con ganancia reciente de +3,14%. La plataforma promueve mercados pre-market y un modo de crecimiento para nuevos pares que, según participantes, facilita ejecución rápida y profundidad de liquidez. Las tasas de financiación observadas en ciertos mercados vinculados a HYPE han alcanzado extremos —entre 100% y 800% APR—, indicadores de presión especulativa intensa.
WLFI (World Liberty Financial) se negocia alrededor de $0,159 y registró un alza intraperiodo del +0,52%, con subidas de hasta 36% desde un mínimo del 21 de noviembre. Su impulso incorpora un componente político marcado por la vinculación con la familia Trump y medidas tokenómicas como una quema de 166,7 millones de tokens y una reducción de oferta aprobada del 50%.
Inversores institucionales y figuras con posiciones relevantes han participado: una entrada cercana a $900 millones atribuida a Justin Sun y la concentración del 56% de la oferta entre insiders han generado debates sobre centralización; además, la venta de 100 millones de tokens a un minero por $25 millones añade una capa de movimientos estratégicos que algunos analistas vinculan a riesgo de desinversión selectiva.
Altcoins HYPE, WLFI y ENA: factores detrás del repunte
Los factores técnicos y narrativos explican el momentum, pero también elevan la volatilidad y la probabilidad de eventos adversos. Desbloqueos de tokens, acusaciones de manipulación, vulnerabilidades de seguridad y phishing ya han aparecido en el ecosistema de WLFI. La presencia de altas tasas de financiación en mercados asociados a HYPE implica costes elevados para posiciones apalancadas y potenciales episodios abruptos de liquidación.
Para ENA, la complejidad del mecanismo de colateralización y dependencia de mercados de derivados plantea riesgos de modelado y liquidez.
El repunte de HYPE, WLFI y ENA ilustra cómo la maduración de Bitcoin puede desplazar capital hacia proyectos más volátiles con historias técnicas o políticas fuertes; los rendimientos potenciales vienen acompañados de riesgos de concentración, explotación y alta volatilidad.
