Arthur Hayes, el reconocido cofundador de BitMEX, ha sacudido el mercado al declarar públicamente su salida total del proyecto Monad (MON), instando a sus seguidores a vender, lo que contrasta con la actividad de las ballenas de Monad. A pesar de sus comentarios bajistas y el giro drástico en su postura de inversión, los grandes tenedores han optado por ignorar el ruido mediático, aprovechando la caída de precios para acumular el activo masivamente durante las últimas horas.
Según los datos de rastreo en cadena proporcionados por la plataforma de análisis Lookonchain, existe una clara divergencia entre el sentimiento público y la acción del dinero inteligente. Una billetera de alto perfil, identificada como 0x9294, retiró 73.36 millones de tokens MON, una operación valorada en aproximadamente 3 millones de dólares ejecutada en un solo día.
Además, las «mega ballenas» incrementaron sus posiciones en un 10.67%, controlando ahora colectivamente más de 300 millones de tokens. De este modo, estos grandes jugadores añadieron millones de dólares en liquidez mientras el precio descendía.
¿Es esta manipulación mediática una oportunidad de entrada para inversores astutos?
Este conflicto de intereses surge apenas 48 horas después de que Hayes promocionara el token con un objetivo de 10 dólares, calificándolo irónicamente como otro «L1 inútil de baja flotación». Este comportamiento errático pone de manifiesto la fragilidad del sentimiento en torno a los nuevos lanzamientos. Lejos de seguir a la multitud, los inversores institucionales parecen estar ejecutando una estrategia de acumulación basada en fundamentales. Asimismo, el entorno se ha complicado por ataques de «spoofing» con tokens falsos, diseñados para engañar a los usuarios y crear una falsa percepción de actividad.
Por otra parte, el impacto en la cotización ha sido inmediato, con MON sufriendo una corrección superior al 13% hasta tocar los 0.0412 dólares. Mientras el pánico se apodera de los minoristas, Hayes ha rotado su capital hacia la economía de rendimiento real, adquiriendo millones en tokens ENA, PENDLE y ETHFI. Específicamente, compró 4.89 millones de ENA y 436.000 PENDLE en dos días. Esta rotación sugiere que, mientras desacredita públicamente a Monad, busca refugio en activos con flujos de ingresos establecidos.
La situación actual de Monad representa una prueba de fuego sobre quién controla realmente la dirección del mercado: las voces ruidosas de los influencers o las billeteras profundas. Se espera que la volatilidad persista a corto plazo mientras el mercado digiere la salida dramática de Hayes. Sin embargo, la persistente compra por parte de las ballenas podría sentar las bases para una recuperación, sugiriendo que el activo podría estar infravalorado en estos niveles de soporte.
