DefiLlama volvió a mostrar los datos de futuros perpetuos de Aster, pero advirtió que no ha logrado comprobarlos y mantiene huecos en el registro. El sitio había borrado esas métricas hace quince días y ahora las recupera rodeadas de avisos, aclarando que nadie ha validado su veracidad.
DefiLlama retiró la información al detectar que los volúmenes de pares como ETH/USDT y XRP/USDT copiaban casi punto por punto los de Binance, un patrón típico de wash trading —operaciones entre cuentas alineadas para inflar la actividad.
Antes del borrado, Aster figuraba con 24 700 millones de dólares diarios en futuros y 1 850 millones en TVL; el open interest pasaba de 3,72 millones a 1 250 millones, según la ficha del protocolo.
El token de Aster cayó más de un 10 % el día del borrado y repuntó más de un 5 % cuando los datos regresaron, aunque el tramo anterior a la suspensión sigue incompleto, lo que impide contrastar el período de crecimiento que generó las sospechas.
0xngmi, cofundador de DefiLlama, reiteró que «los números no se pueden verificar» y que la devolución obedece a un pedido de Aster mientras trabajan en «mejoras».
Wash trading sigue siendo, prácticamente, comprarse y venderse a uno mismo para parecer más activo de lo que se es.
¿Para qué sirve tener en cuenta estos datos?
Los datos de Aster sirven como referencia, no como prueba, por lo que cualquier decisión exige revisar cadenas de bloques y fuentes externas.
El episodio recuerda a los agregadores que cubrir mucho no equivale a cubrir bien, y a los proyectos que la credibilidad exige cifras que cualquiera pueda comprobar.
Lo próximo es que Aster muestre auditorías que cualquiera pueda repetir y complete el registro faltante; mientras tanto, la comunidad debe exigir trazas claras antes de fiarse de los indicadores.
En síntesis, hasta que exista verificación independiente y un historial completo, conviene tratar las métricas de Aster con cautela y validarlas por cuenta propia.