El Banco de Inglaterra (BoE) inició una consulta clave el 10 de noviembre de 2025. El BoE, en coordinación con la Financial Conduct Authority (FCA), busca establecer la regulación de stablecoins en Reino Unido. El objetivo es integrar estos activos en los sistemas de pago nacionales sin comprometer la estabilidad financiera.
La consulta se centra en las «stablecoins sistémicas». Estas son aquellas cuyo fallo, según el BoE, podría generar efectos en cadena en el sistema financiero. Los emisores deberán mantener reservas líquidas de alta calidad. Estas reservas deben ser equivalentes al 100% del valor de los tokens en circulación. Además, el plan exige estrictos requisitos de resiliencia operativa y planes de recuperación.
Esta propuesta busca habilitar el uso de stablecoins en pagos cotidianos. Sin embargo, impone controles estrictos para garantizar la confianza. La exigencia de reservas 1:1 busca asegurar la capacidad de canje en momentos de tensión del mercado. El BoE y la FCA adoptan un enfoque dual. El banco central vigilará la estabilidad sistémica, mientras que la FCA gestionará la protección al inversor, la emisión y la custodia.
¿La nueva regulación británica frenará la adopción o construirá confianza?
El marco propuesto tiene implicaciones significativas para el mercado. El aumento de requisitos de reservas elevará los costes de entrada para los emisores. Esto podría favorecer a grandes actores institucionales y consolidar el mercado. Sin embargo, la propuesta más controvertida es el límite de propiedad individual. Se sugiere un tope de £20.000 para stablecoins denominadas en libras.
La industria ha cuestionado este límite. Advierten que podría frenar la adopción minorista y limitar casos de uso de alto volumen. También existe el riesgo de que un régimen conservador desplace talento y capital hacia jurisdicciones más permisivas. Pese a esto, la integración formal de stablecoins podría acelerar los pagos transfronterizos y beneficiar la economía digital. El sector tiene hasta finales de 2026, fecha prevista para las reglas definitivas, para debatir esta regulación de stablecoins en Reino Unido.
