En una reciente declaración, el gobierno de los Estados Unidos ha anunciado su intención de subastar aproximadamente $118 millones en Bitcoin (BTC) incautados durante el caso de la Ruta de la Seda.
A pesar de las primeras preocupaciones sobre posibles consecuencias negativas en el mercado criptográfico, expertos sostienen que esta venta no debería tener un impacto significativo.
La subasta surge después de la condena de Ryan Farace y su padre, Joseph Farace, por conspiración de lavado de dinero relacionada con la Ruta de la Seda.
La medida busca disponer de alrededor de 2,934 BTC, según un aviso de incautación fechado el 10 de enero, que captó la atención en redes sociales el pasado miércoles 24 de enero.
United States government expected to sell $130 million #bitcoin seized from Silk Road.
Uh oh dump incoming? 😂 pic.twitter.com/mi99as8GUU
— Layah Heilpern (@LayahHeilpern) January 25, 2024
A pesar de las especulaciones iniciales acerca de una posible «venta masiva» de Bitcoin, muchos analistas consideran que la magnitud de esta subasta es relativamente pequeña en comparación con las recientes actividades del mercado.
Steven Lubka, Director Gerente en el intercambio de Bitcoin Swan Bitcoin, comparó los planes gubernamentales con las salidas recientes del Fideicomiso Bitcoin de Grayscale (GBTC), señalando que la venta gubernamental es insignificante en comparación.
El GBTC ha vendido 106,575 BTC por valor de $4.2 mil millones desde su transición a un fondo cotizado en bolsa de Bitcoin el 11 de enero.
La última salida del GBTC el 24 de enero fue de 10,871 BTC, destacando la capacidad de los inversores para manejar transacciones más grandes sin afectar sustancialmente el mercado.
La subasta del gobierno de USA representa solo el 1.5% de sus tenencias totales de Bitcoin, estimadas en 194,188 BTC
Estas tenencias provienen de varias incautaciones, incluidas las de Bitfinex en enero de 2022, el caso de la Ruta de la Seda en noviembre de 2020 y las incautaciones del hacker de la Ruta de la Seda James Zhong.
A lo largo de la historia, el gobierno de EE. UU. ha subastado Bitcoin desde 2014, cuando el capitalista de riesgo Tim Draper adquirió cerca de 30,000 BTC en una subasta.
En un cambio respecto de las prácticas históricas, el gobierno adoptó recientemente una estrategia moderna para liquidar las criptomonedas incautadas.
En lugar de adherirse a los métodos tradicionales de subasta, las autoridades ahora están optando por aprovechar los exchanges digitales como una plataforma dinámica para la venta de activos digitales confiscados.
Este enfoque contemporáneo no sólo refleja un reconocimiento del panorama cambiante del mercado de las criptomonedas, sino que también reconoce la eficiencia y accesibilidad que ofrecen los exchanges en línea para llegar a un espectro más amplio de compradores potenciales.
Analistas y expertos del mercado anticipan que esta subasta no afectará significativamente la estabilidad del mercado de criptomonedas.
Aunque la venta representa una suma considerable, su escala es pequeña en comparación con las actividades recientes del mercado de BTC, y se espera que la resistente comunidad criptográfica absorba sus efectos sin mayores contratiempos.