Según un informe de The Wall Street Journal del 28 de junio, FTX, el exchange de criptomonedas que quebró, está progresando para convertirse en un nuevo exchange. El reinicio del Exchange FTX.com está en marcha, según el jefe de reestructuración de FTX, John Ray. Dijo que la empresa ha iniciado el proceso de búsqueda de socios potenciales para el relanzamiento de la bolsa.
Las personas que conocen el asunto dijeron que FTX ha estado hablando con posibles inversores sobre la financiación para el relanzamiento.
FTX Está Listo para Seguir Adelante
Una de las partes que ha mostrado interés en adquirir FTX es Figure, una empresa que ofrece préstamos basados en blockchain. La fecha límite para presentar las Cartas de Intención, que especifican los términos y condiciones de la oferta de cada postor, es el final de esta semana.
Los acreedores de FTX podrían tener la oportunidad de convertirse en accionistas del cripto exchange reestructurado, así como recibir otras formas de compensación.
La compañía planea cambiar su nombre a algo nuevo, en lugar de usar «FTX 2.0» o un nombre similar, para evitar cualquier asociación con sus problemas anteriores. El equipo de FTX, dirigido por John Ray, ha decidido que un reinicio es la forma más efectiva de garantizar que los acreedores obtengan el mejor resultado posible en términos de pago.
El equipo legal de FTX, un exchange de criptomonedas, declaró en abril que anticipaban completar el lanzamiento de su nueva plataforma de exchange para el segundo trimestre de 2024. Sin embargo, el proceso de recuperación de FTX no está exento de dificultades. Un informe del 26 de junio reveló un enorme déficit de casi $2 mil millones en las cuentas de FTX.
Además, los esfuerzos para recuperar estos fondos perdidos se han visto obstaculizados aún más por las denuncias de mal uso de los activos de los clientes por parte de líderes clave en FTX. El 27 de junio, FTX demandó a Daniel Friedberg, exfuncionario regulador de FTX, a quien se ha mencionado como parte no identificada en muchos procedimientos legales.
La demanda acusa a Friedberg de organizar pagos de «dinero secreto» para silenciar a posibles denunciantes y aprobar transferencias y préstamos fraudulentos. La investigación sobre el dinero no contabilizado reveló varias transacciones que despertaron sospechas, como participaciones en empresas emergentes, un gran acuerdo inmobiliario en las Bahamas y generosas contribuciones a organizaciones benéficas.
