Puntos clave de la noticia
- Ripple ha presentado el Formulario C para apelar una parte del fallo judicial de 2023.
- La SEC no está impugnando que el XRP sea considerado un valor en sí mismo.
- Ripple sigue confiando en su crecimiento, a pesar del proceso de apelación en curso.
Ripple ha dado un nuevo paso en su enfrentamiento legal con la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC) al presentar el Formulario C, donde detalla los argumentos que planea levantar en su apelación.
La empresa blockchain busca revertir parte del fallo de 2023, en el que la corte determinó que las ventas institucionales de XRP constituían ofertas de valores no registrados.
Today, Ripple filed a Form C – listing the issues we plan to raise on our cross appeal. A few things to keep in mind as we move forward:
The case is not about whether XRP, in and of itself, is a security. XRP is uniquely situated as having clarity (alongside BTC) in not being… https://t.co/AmFocAnbPx
— Stuart Alderoty (@s_alderoty) October 25, 2024
Sin embargo, la SEC no está cuestionando el hecho de que XRP, cuando se vende a minoristas, no sea considerado un valor, lo que ha dado claridad a este activo digital en comparación con otras criptomonedas.
Stuart Alderoty, director legal de Ripple, expresó su confianza en que la empresa ganará esta nueva fase del caso. En sus declaraciones, explicó que la apelación se basará en el expediente ya existente, lo que significa que la SEC no podrá presentar nuevas pruebas ni exigir más documentación.
La fuente original de esta información fue compartida por Alderoty a través de su cuenta oficial en la plataforma X (anteriormente Twitter), destacando que la claridad sobre XRP ya es «ley del país», y que Ripple tiene un sólido historial a su favor en esta apelación.
El enfrentamiento entre la SEC y Ripple ha sido largo y lleno de giros. En 2023, la jueza Analisa Torres dictaminó que si bien XRP no es un valor cuando se vende a consumidores minoristas, las ventas institucionales de este activo sí violaron las leyes de valores estadounidenses.
Ripple está apelando esta última parte del fallo, buscando revertir la decisión que podría tener un impacto significativo en cómo se regulan las criptomonedas en el futuro.
A pesar del reto que supone esta apelación, Alderoty dejó claro que Ripple no se ha detenido. Según él, la empresa continúa creciendo y fortaleciendo su negocio, incluso mientras este proceso judicial sigue su curso.
La estrategia de Ripple y el futuro del caso
En su reciente comunicado, Alderoty subrayó que la estrategia de la SEC ha sido generar distracción y confusión, no solo para Ripple, sino para toda la industria de las criptomonedas.
No obstante, para Ripple, este ruido ya es solo parte del pasado.
El ejecutivo confía en que lo más difícil del caso ya ha quedado atrás, y ahora la empresa puede enfocarse en lo que viene: ganar la apelación y continuar desarrollando su negocio sin mayores obstáculos.
Por otro lado, Brad Garlinghouse, CEO de Ripple, también se mostró optimista sobre el resultado de la apelación, señalando que una victoria para Ripple podría representar un revés importante para las ambiciones regulatorias de la SEC en el sector de las criptomonedas.
Garlinghouse, además, destacó que Ripple sigue operando dentro de los márgenes de la ley y confía en que su enfoque los sitúa «del lado correcto de la historia».
Mientras tanto, la SEC también ha presentado su propio Formulario C, buscando revertir otros aspectos del fallo de 2023, particularmente las ventas programáticas de XRP en plataformas de criptomonedas.
Sin embargo, no están apelando la multa de $125 millones impuesta a Ripple ni la decisión de la jueza de no exigir la devolución de ganancias (disgorgement). Esto deja claro que, aunque el enfrentamiento continúa, Ripple avanza con optimismo en lo que considera una batalla legal casi superada.