Polymarket está cerrando una ronda que elevaría su valoración a 15.000 millones de dólares, diez veces el precio de junio de 2025. El movimiento interesa a fondos de inversión, casas de derivados y supervisores porque confirma que el negocio de apostar a eventos se revaloriza rápido y porque la plataforma planea volver a operar legalmente en Estados Unidos.
En junio de 2025 Polymarket valía cerca de 1.000 millones tras recibir unos 200 millones liderados por Founders Fund. A finales de octubre ya se habla de una nueva inyección que fijaría la compañía entre 12.000 y 15.000 millones, según Bloomberg y Reuters.
Intercontinental Exchange, la matriz de la Bolsa de Nueva York, se comprometió a aportar hasta 2.000 millones, un respaldo que puso a la firma bajo los reflectores y colocó al fundador Shayne Coplan entre los emprendedores jóvenes con fortuna de varios miles de millones.
Los volúmenes semanales superan 2 000 millones de dólares y la participación de mercado alcanza el 52%, indicadores de más dinero y más usuarios activos. La empresa ha firmado acuerdos con DraftKings, la liga de hockey NHL y el proyecto World de OpenAI para insertar sus contratos y datos en esas plataformas.
En el frente legal, Polymarket compró QCX, un exchange de derivados registrado en Florida, y habría recibido una carta de “no acción” de la CFTC para ciertos contratos, lo que facilita su regreso a EE. UU. sin enfrentar una acción inmediata del regulador.
¿Qué implica el crecimiento de Polymarket?
Por un lado, el respaldo de ICE y de Founders Fund abre puertas a bancos, corredores y fondos que hasta ahora miraban de lejos. Además, la carta de la CFTC y la adquisición de QCX quitan incertidumbre, pero cualquier cambio de reglas sigue amenazando el modelo.
Hay que tener en cuenta que los volúmenes altos dan profundidad, pero exigen reforzar los filtros de identidad y antilavado. Por último, una valoración que crece diez veces en cuatro meses obliga a aclarar quién controla qué, cuántas acciones salen al mercado y cuándo se prepara una posible salida a bolsa.
A finales de octubre de 2025 la negociación seguía abierta. El paso inmediato es que ICE complete su tranche y se cierre la ronda; eso fijará si la valoración toca los 15 000 millones y marcará el calendario para operar legalmente en Estados Unidos.