DASH subió 35% en un día y acumula 150 % en 2025; rompió una caída de cinco años y volvió a precios de diciembre de 2024. Esta recuperación llama la atención de quienes operan con perpetuos, manejan tesorerías o controlan riesgos. Pese a la ganancia fuerte, los indicadores técnicos y de derivados apuntan a una corrección próxima.
El salto de DASH se explica por el regreso del interés en monedas privadas, el lanzamiento de DashPay y la llegada de Dash Platform 2.0, que ofrece más privacidad y capacidad. En el corto plazo, los analistas del informe ven el precio entre 70 y 100 dólares; algunos llegan a 275 dólares para 2030.
Las métricas confirman sobrecompra y un sesgo bajista en los derivados: el RSI de 14 días marcó 84,45 —el RSI mide la velocidad del precio y valores sobre 70 indican sobrecompra—. En los mercados de perpetuos, la tasa de financiación está en -0,037 %, lo que muestra que hay más gente apostando a la baja.
A pesar del rally, DASH cotiza un 96% por debajo del máximo de 2017, una muestra de su volatilidad y de lo lejos que está su récord. El movimiento dentro de un mercado alcista impulsado por entradas de instituciones y expectativas de políticas monetarias más flexibles.
Las claves de la subida de DASH
La mezcla de señales técnicas y de derivados deja varias advertencias prácticas para traders y tesorerías. Por un lado, se encuentra la alta probabilidad de corrección rápida. Esto se debe al RSI extremo y el funding negativo avisan de un posible retroceso.
Por otro lado, la volatilidad y ejecución de las posiciones grandes sufren giros bruscos; por lo tanto conviene ajustar tamaño y stops.
También se encuentra la gran oportunidad de swing. Los vaivenes diarios y cambios de liquidez abren espacio para pares y coberturas. El precio depende de noticias sobre adopción y actualizaciones; cualquier anuncio negativo impacta.
DASH lidera la recuperación, pero con alto riesgo de retroceso en las próximas semanas. Para traders e instituciones, la lectura es directa: hay oportunidad si se controla el riesgo.