Aster registró un avance del 15% hasta $1,35, en un movimiento que coincide con una intensa acumulación de grandes tenedores. La subida y el volumen concentrado colocan a Aster en una zona de decisión técnica con el objetivo inmediato en $1,50.
En las 48 horas previas al repunte, direcciones clasificadas como “ballenas” —con tenencias entre 100 millones y 1.000 millones de tokens— acumularon aproximadamente 230 millones de ASTER, valorados en más de $310,5 millones, según Santiment. Ese flujo concentrado explica gran parte del impulso alcista y altera la relación oferta-demanda a corto plazo, incrementando la probabilidad de movimientos direccionales de mayor amplitud.
El indicador de momentum por compresión (squeeze momentum), que mide periodos de volatilidad comprimida y tendencia potencial, muestra una fase de presión acumulada; tal configuración suele preceder movimientos amplificados en precio. El nivel técnico inmediato a superar es $1,39; una ruptura sostenida abriría la ruta hacia $1,50. Si el precio no logra consolidarse por encima de $1,39, los soportes relevantes son $1,25, $1,15 y, en un escenario de mayor presión vendedora, $1,00.
Aster opera como un exchange descentralizado (DEX) orientado a ejecuciones sin MEV y ofrece hasta 100x de apalancamiento en múltiples cadenas. MEV (valor extraíble por mineros/validadotores) se refiere a ganancias derivadas de reordenar, incluir o censurar transacciones; una ejecución sin MEV busca reducir ese tipo de extracción de valor, con la meta de mejorar la eficiencia y la equidad en la ejecución.
Aster: acumulación de ballenas y señales técnicas
El ecosistema presenta dos lotes de métricas divulgadas: algunos reportes del equipo indican $522.000 millones en volumen de trading acumulado, 2 millones de usuarios y $464 millones en TVL; otras fuentes del sector señalan más de $2 billones en volumen acumulado, 520.000 usuarios y $1.000 millones en TVL. Esta disparidad condiciona la evaluación del tamaño real del proyecto y exige cautela al interpretar la tracción.
Además, el proyecto completó una recompra de tokens por $140 millones, equivalente a 100 millones de ASTER, operación comunicada como medida para gestionar oferta y reforzar compromiso a largo plazo, lo que podría influir en la dinámica de precios al reducir inventario circulante.
No obstante, existen señales de riesgo que condicionan la lectura optimista. En octubre de 2025, la plataforma fue deslistada por un agregador de datos tras alegaciones de wash trading, hecho que provocó una caída del 10% en el precio. A comienzos de noviembre, un mensaje del fundador de Binance que declaró una compra personal impulsó un repunte del 20% seguido de una corrección del 14% en horas, ilustrando la sensibilidad del activo a influencers y noticias.
En ese mismo periodo se registraron más de $1.800 millones en liquidaciones globales de criptoactivos, y se ha reportado una alta concentración: el 96% de la oferta estaría distribuida en seis wallets, lo que implica que una venta significativa desde esas tenencias podría generar caídas abruptas. Además, está pendiente la liberación de 183,1 millones de tokens que podría añadir presión de venta.
El avance de Aster refleja una combinación de acumulación concentrada y fundamentos técnicos y de producto atractivos; sin embargo, la alta concentración de suministro y eventos previos de manipulación de volumen plantean riesgos concretos.
