ofrecido – El número creciente de las OIC ha tomado el público en general totalmente por sorpresa, e incluso los reguladores experimentados del mundo parecía estar bastante pasmado por su abundancia. Teniendo en cuenta el riesgo de estafas o simplemente inversiones fallidas en un proyecto honesto, podría decirse que todo el negocio puede describirse mejor como un salvaje oeste, que está lleno de buscadores de la fiebre del oro, ladrones de trenes y charlatanes que ofrecen curas mágicas para cada enfermedad.
Este mundo caótico probablemente ha impulsado a Wings , un DAO del mercado de predicción, a implementar su funcionalidad. En lugar de tratar de derrotar el caos, Wings busca aprovecharlo y combatir la incertidumbre con incertidumbre. Su enfoque para clasificar a los ICOs parece bastante único y podría ser una de las mejores respuestas a las súplicas de los inversionistas criptográficos. En esta función, analizaremos más de cerca la idea detrás del proyecto.
¿Qué son las alas?
En términos técnicos, Wings permite que los proyectos que tienen ICO presenten sus agendas al público en general para evaluarlos y predecir qué tan exitosos serán los proyectos. Los usuarios de Wings estiman características tales como la idea general del proyecto, la viabilidad de su hoja de ruta, la campaña de marketing, etc.
Lo más importante para los proyectos es que la comunidad evalúa la cantidad de dinero que una startup puede potencialmente recaudar. Esto permite a los equipos de proyecto modificar sus metas financieras si es necesario y evaluar el interés de la comunidad en su oferta.
¿Cómo funcionan las alas?
Este mecanismo ofrece un gran incentivo tanto para los proyectos como para la comunidad. Por lo tanto, si la predicción resulta correcta, los pronosticadores obtienen sus recompensas de los proyectos. El proyecto, por otro lado, recibe una evaluación competente por parte de un grupo central de su público objetivo y, por lo tanto, sabe si algo está mal.
Desde el punto de vista organizativo, Wings es un DAO, lo que significa que utiliza contratos inteligentes para el autogobierno, así como para evaluar y gestionar los proyectos presentados. Cada nuevo proyecto obtiene su mercado de predicción que cubre casi todos los aspectos importantes de su operación.
Un usuario de Wings puede ser un proyecto o un pronosticador. Un proyecto debe proporcionar toda la información necesaria, como materiales de marketing, documentación, modelo de gobierno inicial (gobierno de DAO directo o líquido), hitos de la hoja de ruta, etc. Lo más importante es que el proyecto puede configurar el suministro de token y las reglas para su distribución entre los pronosticadores. Para esa lista, Wings cobra una tarifa del equipo del proyecto en los tokens nativos de la plataforma.
Los pronosticadores, que también tienen esos tokens nativos, los usan para votar por la aceptación del proyecto a la lista. En caso de que aparezca en la lista, hacen sus predicciones durante el llamado "período de pronóstico" y, cuando termina, la propuesta se activa en la plataforma. Solo así el proyecto podrá lanzar su actual ICO. Si va según lo previsto, los fondos se distribuyen en un conjunto de contratos inteligentes creados específicamente en la plataforma.
¿El modelo de alas es factible?
La cuestión de la viabilidad de este modelo es casi irrazonable. Por ahora, ha habido más de 30 proyectos listados en Wings, y sus resultados acumulativos son bastante impresionantes: solo en 2017, han recaudado casi $ 430 millones, por lo que, desde el punto de vista financiero, el modelo es completamente factible.
En el pasado, Wings también ha tenido su propio ICO exitoso. Sus fichas ERC-20 se preminaron y el 75% de ellas se vendieron durante la campaña recaudando casi $ 2 millones. El 25% restante fue para formar la Wings Foundation, que es la organización gobernante para el ecosistema, así como para recompensar al equipo, los asesores y las referencias, y para establecer un presupuesto del programa de recompensas.
Sin embargo, el equipo ve su misión en la creación de un amplio ecosistema que permita a la comunidad filtrar proyectos buenos y esenciales, dejando todas las estafas e ideas muertas en la acera. Teniendo en cuenta la continua ambigüedad del clima regulatorio para las OIC, este modelo podría eventualmente convertirse en un mecanismo de autorregulación que recompensaría a los buenos proyectos y a la comunidad, a la vez que mantendría a todos los jugadores deshonestos sin la necesidad de contar con marcos legales complejos.
La necesidad de un sistema de este tipo para la industria de la criptomoneda ha sido evidente durante años (piense en Mt.Gox o en cualquier otra estafa ICO reciente). Mientras tanto, la búsqueda de una solución confiable y eficiente que no esté cubierta de burocracia y la constante intrusión del gobierno continúe al mismo tiempo. ¿La solución de Wings es la única? Podría ser, pero, como siempre, solo el tiempo lo puede decir.
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