La firma dirigida por Cathie Wood ha ejecutado nuevamente su conocida estrategia de inversión de Ark Invest, aprovechando la reciente caída de precios para aumentar su exposición. Ark Invest adquirió participaciones significativas en empresas clave del sector como Coinbase, Circle y BitMine este lunes. La gestora de fondos reafirma así su convicción alcista a largo plazo, desafiando la tendencia bajista temporal que afectó a los mercados de renta variable vinculados a las criptomonedas.
Las compras más destacadas se centraron en BitMine Immersion Technologies y el intercambio estadounidense Coinbase, sumando activos por un valor conjunto superior a los 33 millones de dólares. Específicamente, a través de tres de sus ETF gestionados activamente, la firma añadió más de 550,000 acciones de BMNR valoradas en aproximadamente 17 millones de dólares. Por otro lado, también incorporó casi 65,000 acciones de COIN, con una valoración de mercado cercana a los 16,5 millones de dólares al momento de la operación.
Además de estas dos grandes apuestas, el fondo diversificó su capital inyectando liquidez en otros actores relevantes del ecosistema digital que también sufrieron descuentos en su cotización. Ark destinó alrededor de 11,8 millones de dólares al emisor de monedas estables Circle, 5,3 millones al intercambio Bullish y un millón adicional en Brera Holdings. Asimismo, las acciones de este trío de compañías habían registrado caídas de al menos un 6% durante las últimas cinco jornadas de negociación bursátil.
¿Es el momento ideal para la acumulación institucional agresiva?
Actualmente, Coinbase se consolida como la tercera mayor participación de la firma, mientras que Circle y BitMine ocupan los puestos 12 y 14 respectivamente en su portafolio global. Según los datos públicos de las tenencias de Ark, la firma posee ahora 609 millones de dólares en acciones de COIN, junto con 323 millones en Circle y 275 millones en BitMine. Esta acumulación metódica sugiere que Wood percibe los precios actuales, como los 251,88 dólares de COIN, como puntos de entrada atractivos.
Por otra parte, es relevante destacar que estas adquisiciones ocurren en un contexto donde el precio de Bitcoin ha retrocedido significativamente desde sus máximos históricos de octubre. A pesar de haber rebotado un 2,6% el martes hasta los 87,716 dólares, la criptomoneda líder sigue estando más de un 30% por debajo de su récord de 126,080 dólares. No obstante, Wood ha ajustado sus expectativas, reduciendo su objetivo de precio para 2030 de 1,5 a 1,2 millones de dólares por unidad.
¿Cómo influye la adopción de stablecoins en las proyecciones?
La directora ejecutiva de Ark justificó este ajuste en su predicción citando el creciente uso y adopción de las monedas estables en la economía global. Según su análisis, la proliferación de stablecoins minimiza uno de los casos de uso potenciales que originalmente se atribuían exclusivamente a Bitcoin. Sin embargo, mantiene que el activo podría haber visto ya sus mínimos, argumentando que la aceptación institucional está interrumpiendo y modificando los patrones tradicionales del ciclo de cuatro años del mercado.
Adicionalmente, la firma también mostró confianza en sus propios productos financieros al añadir cerca de 400,000 dólares en acciones de ARKB, su propio ETF de Bitcoin. Esta operación se realizó mientras el precio del activo caía momentáneamente por debajo de la marca de los 86,000 dólares. De este modo, la gestora demuestra coherencia entre su discurso público y sus movimientos financieros, apostando capital fresco en los vehículos de inversión que ella misma promociona ante sus clientes institucionales y minoristas.
Finalmente, estos movimientos agresivos de compra en medio de la incertidumbre envían una señal clara al resto del mercado sobre la visión de la gestora. La volatilidad a corto plazo es vista como una oportunidad de compra y no como una señal de salida para los inversores con horizontes temporales amplios. Se espera ver si esta apuesta contracorriente rendirá frutos cuando el mercado retome su tendencia alcista y estas empresas tecnológicas recuperen sus valoraciones previas.
