El presidente electo de Bolivia, Rodrigo Paz, anunció un plan para implementar la tecnología blockchain contra la corrupción en Bolivia. La propuesta se enfoca en reformar radicalmente la contratación pública del país. Esta iniciativa se detalla en la plataforma oficial de gobierno 2025 del Partido Demócrata Cristiano. Paz asumirá el cargo el próximo 8 de noviembre.
El núcleo de la propuesta busca aplicar la tecnología de contabilidad distribuida y los contratos inteligentes en todas las licitaciones estatales. El objetivo principal es eliminar la discrecionalidad en las compras públicas. Al automatizar estos procesos, el nuevo gobierno espera reducir significativamente las oportunidades de soborno. Paz, quien ganó la segunda vuelta electoral con el 54.5% de los votos, hereda una economía tensa. El país enfrenta escasez de combustible y una fuerte presión sobre el dólar estadounidense.
Paralelamente, el plan gubernamental incluye una segunda propuesta audaz. Se creará un nuevo fondo de estabilización cambiaria. Los ciudadanos podrán declarar sus criptoactivos en este fondo. Este mecanismo busca regularizar activos y captar divisas. El fondo se utilizará para estabilizar la moneda nacional. También servirá para pagar importaciones esenciales en medio de la escasez de dólares.
La plataforma de Paz define esta implementación de blockchain como una herramienta pragmática anticorrupción. Es importante notar que no es una adopción al estilo de El Salvador. No hay planes para adoptar Bitcoin como moneda de curso legal. Tampoco se busca mantener BTC en las reservas nacionales. El enfoque es estrictamente sobre la transparencia gubernamental y la capitalización del nuevo fondo.
Este movimiento presidencial se alinea con una modernización que ya estaba en marcha. El Banco Central de Bolivia (BCB) levantó una prohibición operativa sobre transacciones cripto en junio de 2024. Esta decisión autorizó los canales electrónicos regulados. Pocos meses después, el banco central informó que el comercio mensual promedio de activos digitales se había duplicado.
¿Se convertirá Bolivia en el nuevo ‘hub’ cripto de Sudamérica?
El mercado ha reaccionado positivamente a las señales de modernización. En octubre de 2024, Banco Bisa se convirtió en el primer banco boliviano en lanzar servicios de custodia de USDT para instituciones. La escasez de dólares también impulsó al sector privado. La petrolera estatal YPFB exploró el uso de cripto para importaciones de energía. Además, grandes distribuidores de marcas como Toyota, Yamaha y BYD comenzaron a aceptar USDT.
El acercamiento institucional se consolidó el 31 de julio. El BCB firmó un memorando de entendimiento con El Salvador. En dicho documento, calificaron a las cripto como «viables y confiables». Ambas naciones se comprometieron a cooperar en políticas de modernización de pagos. Según el BCB, el volumen de comercio cripto alcanzó los 46.8 millones de dólares mensuales. El acumulado interanual hasta el 30 de junio fue de 294 millones de dólares.
La presidencia de Rodrigo Paz inicia con un claro mandato de reforma tecnológica y económica. Aunque su postura es pragmática y no «cripto-maximalista», la agenda de modernización de pagos es clara. La implementación de la tecnología de bloques en las compras públicas será una prueba clave. El éxito de esta medida podría posicionar a Bolivia como un referente regional en el uso de tecnología para la transparencia gubernamental.