La Ethereum Foundation formó un nuevo equipo de inteligencia artificial para apoyar pagos y operaciones económicas realizados por agentes, bajo la dirección del investigador Davide Crapis. El anuncio apunta a que agentes autónomos gestionen pagos, coordinen acciones y apliquen normas en Ethereum. La medida impacta directamente a desarrolladores, proyectos DeFi y custodios, anticipando cambios en diseño de contratos, auditoría y gobernanza.
Objetivos y alcance técnico
El nuevo equipo busca que agentes y robots puedan gestionar pagos, coordinar acciones y aplicar normas dentro del ecosistema Ethereum. El enfoque promueve modelos económicos donde entidades algorítmicas negocian términos, gestionan riesgos y resuelven disputas sin intervención humana, lo que demanda nuevas prácticas de diseño y verificación en contratos inteligentes.
La Fundación trabajará en estándares de interoperabilidad y seguridad para agentes inteligentes, con el fin de que actores de distintas procedencias interactúen y transaccionen con confianza sobre contratos. Esto incluye especificaciones para orquestar reglas, permisos y trazabilidad de decisiones algorítmicas dentro de infraestructuras públicas.
Los cambios afectarán a desarrolladores, proyectos DeFi y custodios, al requerir ajustes en arquitectura de contratos, auditorías previas al despliegue y mecanismos de gobernanza que contemplen la autonomía de los agentes.
Financiación, seguridad y adopción en la industria
Para financiar la iniciativa, la Fundación vendió 10.000 ETH, destinando los fondos a investigación, subvenciones y programas comunitarios. El objetivo es respaldar el desarrollo de especificaciones y guías técnicas que habiliten el uso seguro de agentes en pagos y operaciones.
La iniciativa coincide con el creciente interés del sector privado, donde empresas exploran pagos con agentes, como Agent Pay de Mastercard o colaboraciones con Microsoft, lo que sugiere que la interoperabilidad entre infraestructuras privadas y capas públicas será un eje clave. En este contexto, seguridad de contratos y trazabilidad de decisiones algorítmicas se convierten en prioridades operativas y regulatorias.
La seguridad exigirá más auditorías especializadas, señaladas como recomendación por firmas del sector. También surgen nuevas rutinas de cumplimiento que combinan verificación de identidad de clientes con verificaciones de comportamiento algorítmico, donde la discusión sobre “prueba de humanidad” cobra relevancia para distinguir agentes legítimos de actores maliciosos.

Próximos pasos
El anuncio marca el inicio de la formalización de capacidades y estándares para agentes económicos autónomos en Ethereum. El próximo paso será la publicación de especificaciones técnicas y guías de seguridad, que definirán plazos de adopción y requisitos de cumplimiento para proyectos que busquen implementar pagos con agentes.
La creación del equipo de IA y la financiación asociada aceleran la experimentación con agentes autónomos, al tiempo que elevan las exigencias de seguridad, auditoría y gobernanza para quienes operen en el ecosistema Ethereum.