La normativa propuesta para las stablecoins en Singapur va acompañada de planes para restringir el acceso a los mercados de criptomonedas para algunos inversores minoristas. Estos documentos ya están disponibles para su consulta pública y permanecerán así hasta el 21 de diciembre.
Además, el Banco Central de Singapur anunció el miércoles que las personas que deseen comerciar con criptomonedas en Singapur pronto tendrán que hacer un examen para demostrar que entienden en qué se están metiendo. Esta medida se toma en un esfuerzo por evitar que los inversores ingenuos vayan a la quiebra.
Según un documento de consulta sobre posibles medidas reguladoras de los servicios de tokens de pago digitales, a la Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) le preocupa que los consumidores minoristas no tengan la capacidad financiera para absorber las grandes pérdidas que se esperan de la negociación especulativa de mercados que no comprenden del todo.
La Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) declaró, al dar a conocer las propuestas para proteger a los comerciantes, que el comercio de criptomonedas está plagado de peligros y no es apropiado para los miembros del público en general.
Sin embargo, las criptomonedas desempeñan un papel de apoyo en el ecosistema más amplio de los activos digitales y no es posible prohibirlas debido a este papel.
La Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) observó que varios participantes de la industria han indicado su interés en trabajar juntos para producir una plantilla de evaluación estándar y están a favor de que se aplique algún tipo de evaluación a los inversores minoristas.
Se hizo hincapié en que contar con una plantilla estándar facilitaría el mantenimiento de la uniformidad y garantizaría la solidez en todo el sector.
Los inversores de Singapur y las criptomonedas
Según una encuesta reciente de KPMG, la élite rica de Singapur está mirando los activos digitales con gran interés. El informe afirma que más del 90% de las oficinas familiares y los HNWI están considerando o ya han invertido en activos digitales.
DBS, el mayor banco de Singapur, declaró en septiembre que iba a abrir los servicios de criptomonedas en su Exchange digital (DDEx) a unos 100.000 clientes acaudalados que cumplen los requisitos relativos a sus ingresos para ser clasificados como inversores acreditados, asegurando así el cumplimiento de la postura de las autoridades reguladoras de que los criptoactivos no son adecuados para los inversores normales.