Do Kwon, el ex director ejecutivo de Terraform Labs, la compañía detrás de la stablecoin TerraUSD, enfrenta un cargo de fraude multimillonario en los EE. UU. Fue arrestado en marzo de 2023 junto con su ex oficial de finanzas Han Chang-Joon en Montenegro, donde intentaron huir a Dubái con pasaportes y ordenadores portátiles falsos.
Tribunal de Montenegro Niega Fianza
Un tribunal de Podgorica les concedió inicialmente una fianza de 800.000 euros. Pero la decisión fue anulada por un tribunal superior el miércoles. El tribunal coincidió con el fiscal en que la fianza no era garantía suficiente y que los acusados no tenían interés en permanecer en Montenegro a la espera de su extradición.
El Tribunal de Distrito de EE. UU. en Manhattan acusó formalmente a Do Kwon y Han Chang-joon de ocho cargos de fraude de valores, fraude electrónico, fraude de productos básicos y conspiración. Supuestamente manipularon el precio de TerraUSD (UST), una criptomoneda que se suponía que estaba vinculada al dólar estadounidense, y defraudaron a los inversores por miles de millones de dólares.
Está acusado de engañar a los inversores sobre la estabilidad y el valor de TerraUSD y Luna. Sin embargo, ambos tokens se desplomaron casi a cero en cuestión de días, lo que provocó una venta masiva en el criptomercado y ocasionó que los inversores perdieran aproximadamente $42 mil millones. Han negado haber actuado mal y afirman que tienen propiedades por valor de millones.
Estados Unidos y Corea del Sur Solicitaron Extradición
Las autoridades estadounidenses han solicitado su extradición y la entrega de sus computadoras portátiles, que pueden contener evidencia de sus crímenes. El arresto y la acusación de Do Kwon han causado una gran conmoción en el mercado de criptomonedas, ya que TerraUSD era una de las stablecoins más populares que afirmaba estar respaldada por activos reales.
Las autoridades de Corea del Sur emitieron una orden de arresto contra Kwon en septiembre de 2022 luego de que lo acusaran de violar las reglas del mercado de capitales en su país de origen. Pensaron que se escondía en Serbia e incluso enviaron funcionarios allí para negociar su extradición, pero aparentemente se había mudado a Montenegro.
Ambos permanecen en prisión preventiva en Montenegro. El caso se considera una de las estafas criptográficas más grandes de la historia y ha planteado dudas sobre la regulación y la supervisión de la industria.
